El calor extremo del verano en EE. UU. está matando a quienes no tienen aire acondicionado
Estados Unidos está experimentando un calor extremo este verano, tan brutal que está matando a personas que no tienen acceso al aire acondicionado. De hecho, julio fue el mes más caluroso registrado. Alguna vez. Por mucho.
Y esto no ha terminado.
Las altas temperaturas en Louisville han superado los 90 grados Fahrenheit esta semana. Se espera que el calor proyectado para la próxima semana en la ciudad sea de alrededor de 90 grados, pero "se sentirá entre 100 y 110 grados durante toda la semana", informó WLKY, una filial local de CBS.
Texas también se ha visto particularmente afectada por la ola de calor de este verano: Austin alcanzó temperaturas de tres dígitos durante 34 días consecutivos y Dallas alcanzó un calor récord durante tres días consecutivos. El Paso también ha visto 56 días de tres dígitos este verano, la tercera frecuencia más alta en la historia de Texas.
Según CNN, al menos 147 personas de solo cinco condados de Estados Unidos han muerto a causa del calor extremo en lo que va de 2023, aunque es probable que esa cifra sea mucho mayor ya que muchas muertes aún están bajo investigación. El condado de Maricopa, Arizona, tuvo al menos 39 muertes relacionadas con el calor hasta el 7 de agosto, y 312 muertes más aún están bajo revisión.
Muchas de estas muertes son el resultado de la falta de acceso al aire acondicionado.
Christian Ruhenkenya, de 17 años, de Louisville, por ejemplo, murió la semana pasada después de que decidió dormir en el auto de su familia para escapar del calor después de que se rompió el aire acondicionado, según WAVE, una filial local de NBC.
El hermano menor de Ruhenkenya dijo que Christian dormía en el coche dentro del garaje con el aire acondicionado encendido, según el medio. Los médicos forenses aún no han determinado la causa de la muerte de Ruhenkenya, pero los expertos recomiendan nunca dormir dentro de un automóvil en marcha porque puede provocar intoxicación por monóxido de carbono.
Las autoridades encontraron a Víctor Ramos, de 67 años, inconsciente en su casa en el condado de Harris, Texas, el 24 de junio, también después de que se le rompiera el aire acondicionado. Ramos murió más tarde en un hospital, y su hermana le dijo a WFAA, una filial local de ABC, que recientemente había perdido su trabajo y no podía permitirse el lujo de reparar su aire acondicionado.
El 16 de junio, Ramona Ison, de 71 años, y Monway Ison, de 72, también fueron encontrados muertos dentro de su casa móvil cerca de Houston después de que se averiara su aire acondicionado.
La hija de la pareja, Roxana Floods, le dijo anteriormente a Insider que tampoco podían permitirse el lujo de reparar su unidad de aire acondicionado. Floods ahora está trabajando para crear conciencia sobre los peligros del calor extremo sin la protección del aire acondicionado, dijo.
"Siento que si le pudo pasar a mis padres, le podría pasar a cualquiera", dijo Floods. "Simplemente creo que se debe generar conciencia sobre qué buscar con el calor, si simplemente calor versus agotamiento por calor o insolación".
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